Rozalén emociona en los Jardines de Viveros con una noche llena de abrazos, música y verdad

El pasado 5 de junio de 2025, Rozalén ofreció en los Jardines de Viveros de València una de esas noches que se quedan grabadas. La cantante albaceteña presentó su nuevo disco El Abrazo en un concierto cargado de emoción, ternura y reivindicación, acompañada como siempre por Beatriz Romero, su intérprete en lengua de signos, que convierte cada concierto en una experiencia verdaderamente inclusiva.

Con un repertorio que viajó entre lo nuevo y los grandes éxitos, Rozalén tejió con delicadeza un espectáculo donde lo cotidiano se volvió extraordinario. Las nuevas canciones de El Abrazo, descrito por la artista como un trabajo “lleno de abrazos y duelos”, conectaron de inmediato con un público entregado, que no tardó en corear tanto los nuevos temas como himnos ya imprescindibles como La Puerta Violeta o Vivir.

El espectáculo fue íntimo sin dejar de ser multitudinario, emocional sin caer en lo meloso, y reivindicativo sin perder la sonrisa. Cada palabra cantada, cada gesto, cada mirada desde el escenario fue un puente directo al alma de quienes llenaron el recinto.

La noche arrancó con la actuación de Abril, joven promesa originaria de Benissa que sorprendió y cautivó con una propuesta valiente y sensible. Su mezcla de raíces tradicionales y texturas electrónicas ofreció un paisaje sonoro rico y emocionante, que encajó a la perfección con el tono íntimo y reflexivo de la noche. Con apenas 21 años, demostró una madurez artística inusual y una capacidad innata para conectar con el público.

Con influencias que van desde Billie Eilish o Rosalía hasta Maria Arnal o Berri Txarrak, Abril se ha ganado el título de artista emergente a seguir de cerca. Su actuación fue el complemento perfecto a una noche donde la emoción fue el lenguaje común.

Rozalén no solo ofreció un concierto: ofreció un abrazo colectivo, un lugar de encuentro, una celebración de la música como espacio de sanación y comunidad.